Infecciones Urinarias: Causas, Síntomas y Prevención
- Dr
- 7 abr
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Las infecciones urinarias (ITU) son uno de los problemas más comunes que afectan al sistema urinario. Aunque pueden ocurrir en cualquier parte del tracto urinario, las infecciones suelen originarse en la uretra o la vejiga, aunque también pueden ascender a los riñones si no se tratan a tiempo. En este artículo, te explicamos las principales causas, síntomas y cómo prevenirlas.
Causas de las infecciones urinarias
La causa más frecuente de las ITU es la presencia de bacterias en el tracto urinario, especialmente la Escherichia coli, que normalmente habita en el intestino. Estas bacterias pueden ingresar a la uretra y multiplicarse en la vejiga, lo que genera la infección. Existen varios factores de riesgo que aumentan la probabilidad de padecer una ITU, tales como:
Sexo femenino: Las mujeres tienen una uretra más corta, lo que facilita que las bacterias lleguen a la vejiga.
Actividad sexual: El contacto sexual puede promover la introducción de bacterias en el tracto urinario.
Obstrucción urinaria: Condiciones como cálculos renales o agrandamiento de la próstata pueden bloquear el flujo urinario, favoreciendo las infecciones.
Sistema inmunológico debilitado: Personas con enfermedades crónicas, como diabetes, o que toman medicamentos inmunosupresores, están más propensas a sufrir infecciones urinarias.
Síntomas comunes
Los síntomas de una infección urinaria pueden variar, pero los más comunes incluyen:
Dolor o ardor al orinar
Necesidad urgente y frecuente de orinar, aunque se expulse poca orina
Orina turbia, maloliente o con sangre
Dolor en la parte baja del abdomen o la pelvis
Fiebre, en casos de infección renal
Es importante acudir a un médico si experimentas alguno de estos síntomas, ya que una ITU no tratada puede derivar en complicaciones más graves, como una infección renal.

Prevención de las infecciones urinarias
La prevención es clave para reducir el riesgo de infecciones urinarias. Aquí algunos consejos útiles:
Higiene adecuada: Mantener una higiene personal adecuada, especialmente en la zona genital, es fundamental para evitar la propagación de bacterias.
Orinar después de las relaciones sexuales: Esto ayuda a eliminar las bacterias que pudieran haber ingresado a la uretra durante el contacto sexual.
Beber suficiente agua: El consumo adecuado de líquidos favorece la eliminación de toxinas y bacterias del tracto urinario.
Evitar productos irritantes: Algunas sustancias, como productos de higiene femenina con fragancia o duchas vaginales, pueden irritar el tracto urinario y predisponer a las infecciones.
Ropa adecuada: Usar ropa interior de algodón y evitar ropa ajustada favorece la ventilación de la zona genital y reduce el riesgo de infección.
En conclusión, las infecciones urinarias son tratables, pero la prevención es esencial. Si experimentas síntomas, no dudes en consultar con un urólogo para recibir el diagnóstico adecuado y seguir un tratamiento efectivo.





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